28 julio, 2011

Parasháh: MASEI/VIAJES
Lectura de la Toráh: Ba Midbár/En el desierto
"Núm."33:1-36:13
Lectura de la Haftaráh: Irmiáhu 1:1; 2:328
DEL MES CUARTO DEL 5772/30 DEL MES DE JULIO DE 2011
Por Julio Dam Rébe Mesiánico


PARASHÁT MASÉI/VIAJES
“UN LLAMADO A COMENZAR DE NUEVO
CON ELOHÍM”  
 En primer lugar, tenemos en esta parasháh,
 un claro llamado y autorización de parte de Elohím
 para ocupar la tierra de Knaán para siempre,

 que es lo que hoy conocemos, en parte como “Israel.”

 Toda especulación y toda teología,
de cualquier religión o denominación que no reconozca este derecho del Creador
 de dar Su tierra a quien Él quiera, y así, se oponga a Israel,
está condenada al fracaso,
aparte de estar condenada a maldición de parte de Elohím,
según Be Reshít/”Gn.” 12:3. No sólo le ordena ADONÁI a ocupar la tierra,
 sino a matar a todos sus habitantes, sin dejar ninguno y aún los amenaza
 (vers. 55-56) con que, los que dejaran vivos, serán una amenaza constante contra ellos.
En segundo lugar, menciona cuatro clases de personas y cosas que deben eliminar:

(1) los habitantes;
 2) sus templos paganos,
3) imágenes de hierro;
4) todos sus altares.

En nuestros días y para nosotros, esto tiene una significación interior,
psicológica, mental y espiritual.
Ya hemos enseñado en nuestros libros de “Romanos”
que tenemos lo que hemos denominado “nuestro paisaje interior”
que es la tierra de Knaán, que Elohím desea convertir en tierra de Israel,
igual que sucedió en la carne en este pasaje.
Los habitantes de Knaán representan las ideas y sentimientos
que flotan en la ideosfera del mundo en que vivimos y que pueblan la tierra de nuestra mente.
 Estas ideas y sentimientos son las que manejamos todo el día en el continuo proceso que llamamos “pensar.”
Así como hay personas buenas y malas, con más razón, existen ideas y sentimientos buenos y malos,
que, sin embargo, conviven en nuestra mente y compiten por nuestra atención,
los knaanítas mentales y sentimentales que tratan de apoderarse de nuestra tierra mental.

 Elohím nos pide exterminarlos a todos, para comenzar de nuevo con Su ayuda.
Como diría el famoso general mexicano del siglo pasado:
“Disparen primero y después virigüen (averiguen).”
Así tenemos que hacer con las ideas y sentimientos
 que no han sido puestas por Elohím sino por nuestra educación mundana
y nuestros ancestros: dispararles primero, antes que nos influencien a nosotros
y tuerzan la voluntad de Elohím para nuestras vidas con su fuerza psíquica.
En el fondo, es como tener la oportunidad de elegir vivir en dos barrios/colonias diferentes:

la primera es una colonia/barrio de talmidím Toráh/de estudiantes de la Toráh,
donde todo el día se estudia el Tanáj y las palabras del Tanáj
y sus traducciones se están barajando todo el día.

 La segunda oportunidad es un barrio de “zona roja”
 donde está plagado de prostitutas, ladrones y asaltantes.
 Lo que ADONÁI les dijo a los israelíes en esta parasháh es:
 destruyan esta “zona roja” espiritual que es Knaán y no dejen a nadie vivo.
 En nuestra época, Elohím nos están diciendo:
“Destruyan la ‘zona roja’ de vuestra mente y corazón
 y no dejen a ninguna de esas ideas, sentimientos o deseos malignos con vida,
 para que no los persigan después con sus pecados.

” DIEZ SUGERENCIAS DE CÓMO CAMBIAR NUESTRO PAISAJE INTERIOR

 A continuación, daremos diez sugerencias respecto
a cómo cambiar el paisaje de nuestra mente para destruir todo lo negativo.

1.APRENDER DE CADA PERSONA.
 Cada uno tiene algo que enseñarnos,
 ya sea positivo o negativo (para que lo evitemos).
 Esto es una lección de humildad para nosotros,
que muchas veces nos creemos superiores a la mayoría de la gente.
 Sin embargo, si tratamos de poner en práctica esta regla,
veremos que se puede aprender mucho de muchas personas.

2.CONVERTIRNOS EN DUEÑOS
DE NUESTRA MENTE Y CORAZÓN.
 Quizás no lo hemos notado, pero NOSOTROS
 somos los dueños de nuestra mente y de nuestro corazón.
 Si permitimos que los pensamientos negativos y los sentimientos negativos nos invadan,
es por culpa nuestra, y no culpa de nadie más.
 Tenemos que tomar el control de nuestros pensamientos y corazón
 y permanecer en control, sin permitir que ha satán
 y su ejército domine esa área de nuestra vida.
 Practiquemos activamente lo que dice en Filipenses 4:8-9:

“En cuanto al resto, hermanos, todo lo que es verdadero,
 todo lo que es honorable, todo lo que es recto,
 todo lo que es puro, todo lo que es agradable, todo lo que es atractivo,
si hay alguna excelencia moral y si hay elogio (de Elohím),
 en esto mediten.
 También todo lo que aprendieron y recibieron y escucharon y vieron en mí,
 estas cosas practiquen; y el Elohím de shalóm esté con ustedes.”

3. ACTUEMOS FELICES.
 A la acción le sigue la emoción. Debemos hacer un esfuerzo,
igual que hacemos un esfuerzo para hacer gimnasia,
 para estar alegres todo el día:
 cantemos, silbemos, tarareemos una canción judía,
alabemos a Elohím con una canción mesiánica,
 riamos, sin causa alguna. Actuemos felices
 y nuestro nivel de felicidad aumentará automáticamente, como dice la Tehiláh 9:2:

 “Agradeceré a ADONÁI con todo mi corazón;
contaré todas tus maravillas.”

4.NUNCA SE COMPARE CON NADIE.
Uno de los problemas que tenemos en la vida
es que queremos ser o tener lo que tiene otro/a.
 Si otros tienen un automóvil nuevo,
 nosotros también queremos ESE auto.
 Si otros tienen una casa con piscina/alberca, nosotros también queremos una.
Sin embargo, esto es sólo falta de sabiduría/jajmáh espiritual,
 ya que Elohím no nos hizo igual a nadie.

¿Por qué pretender ser o tener lo mismo que otro?

Tratemos de desarrollar al máximo las cualidades
 que Elohím nos ha dado para movernos según Su plan,

y no según el nuestro,
y seremos más fructíferos y más felices,
porque la envidia y los celos sólo traen infelicidad a nuestras vidas.

5.PRACTIQUE LA MODERACIÓN EN TODO.
 Tratemos de vivir una vida moderada,
 donde nada es excesivo.
 Nos puede gustar algo: hagámoslo, pero no en demasía.
Nos puede gustar el trabajar 14 horas por día,
pero no es bueno para nuestra salud física ni mental,
de modo que moderemos nuestro “trabajoholismo”
y salgamos a una caminata todos los días,
para moderar nuestra vida. Quizás estamos demasiado aislados de la gente;
practiquemos la sociabilidad y la tzekadáh/el ayudar a los demás,
 en lo que cada uno necesite:
no todos necesitan dinero;
algunos necesitan atención,
oración, ayuda espiritual o psicológica;
brindémosela y estemos seguros que
 Elohím está mirando lo que estamos haciendo por los demás.

6.EVITEMOS LAS SITUACIONES ESTRESANTES.
Quizás nos gustan ciertas diversiones, como el cine de acción,
o el deporte, o hasta las discusiones, especialmente las religiosas,
 pero nos estresan, y terminamos peor de lo que comenzamos.
Evitemos todo aquello que traiga estrés a una cultura
de por sí demasiado estresante como está
 y dediquémonos a actividades que nos traigan placer intelectual o espiritual.

7.MIREMOS NUESTROS PROBLEMAS,
ANGUSTIAS Y PREOCUPACIONES DESDE UN PUNTO DE VISTA SOLUCIONATIVO.
Muchos de nosotros nos pasamos el día pensando pensamientos negativos,
y dando vuelta con ellos, concentrándonos
en todos los problemas y preocupaciones que nos acosan.
 Renunciemos de una vez por todas a esta modalidad de pensamiento
y eliminemos A TRAVÉS DE NUESTRA VOLUNTAD todo pensamiento de este tipo,
 concentrándonos, en cambio, en cómo superar cada uno de estos problemas,
uno a la vez, hasta que logremos éxito tras éxito,
lo que traerá un sentido de shalóm/paz y confianza/bitajón en Elohím,
ya que todo esto debemos hacerlo por medio de la oración
a ADONÁI en el nombre de Ieshúa.

8.CADA DÍA TRATE DE BUSCAR
ALGO QUE LO HAGA FELIZ,
AUNQUE SEA POR UN INSTANTE.
Esta búsqueda creará en nosotros un hábito muy positivo:
el de buscar lo positivo en todo lo que nos sucede y encontrarlo.
Al final, el balance de nuestro día será cada vez más positivo.
 Todos nosotros tenemos actividades que nos satisfacen.
 Busquemos por lo menos una de ellas, y hagámosla todos los días si fuese posible,
para traer a nuestras vidas una porción de felicidad/ósher mental y espiritual.

9.DEJEMOS EL HÁBITO COMÚN
 DE ECHARLE LA CULPA DE NUESTROS PROBLEMAS
A ALGUIEN
Y
BUSQUEMOS DENTRO NUESTRO LA SOLUCIÓN.
Es muy fácil encontrar un culpable para nuestros problemas o malos ratos.
Es más difícil, pero más provechoso el encontrar qué es dentro nuestro,
en nuestra personalidad, lo que PROVOCA que nos sintamos mal y corrijámoslo.

10.NO PERMITAMOS QUE LOS DEMÁS NOS ALTEREN,
NO IMPORTA LO QUE NOS DIGAN.
Admitamos y aceptemos a los demás, cada uno como es:
 algunos son, naturalmente agresivos; otros son negativos;
aceptemos a cada uno como es y no permitamos que eso nos altere el día.
 Sigamos ALEGREMENTE nuestro caminar por el día de hoy,
pidiendo a Elohím que bendiga a cada uno que se cruza en nuestro camino
 y pidiendo la felicidad/ósher para cada uno,
especialmente para nosotros y los miembros de nuestra familia.

CÓMO DESTRUIR LOS TEMPLOS PAGANOS,
 IMÁGENES Y ALTARES DE NUESTRA MENTE
¿Qué representan los templos paganos, las imágenes de hierro y los altares,
 respecto a nuestra mente? Son los valores y las creencias que reverenciamos,
sin darnos cuenta que estamos desplazando a Elohím del lugar central y primario que le corresponde
 Cuando valoramos al hombre, al dinero, a nuestra familia, a nuestro trabajo, por encima de Elohím,
y le dedicamos mucho más tiempo a algunos de estos valores que a Elohím,
estamos adorando templos paganos,
como los israelíes de hace 4000 años y Elohím desea que los destruyamos,
después de identificarlos.
Hágase una pregunta sincera a sí mismo:

 ¿Qué valoro más que Elohím, aunque no me doy cuenta de ello?

 ¿Mi trabajo? ¿Mi carrera? ¿Mi cónyuge? ¿Mis hijos? ¿Mi dinero? ¿Mis amistades? ¿Algunas de estas cosas juntas?

No estamos proponiendo que dejemos de trabajar
ni que dejemos de amar a nuestra familia ni amigos.
 Estamos proponiendo que establezcamos un orden de prioridades que sea eficiente.
El único orden eficiente es aquel que coloca a Elohím primero,
 segundo y tercero en nuestra lista de cosas importantes.
El que todavía no entiende que sin El no podemos hacer nada,
 ni somos nada, todavía no sabe nada y está, sin quererlo,
teniendo templos paganos en su mente y corazón y “paisaje interno.”

Debemos destruirlos uno por uno
 y dejar sólo el Tercer Templo mencionado en 1ª Kefás/Pedro 2:4-5,
que está hecho de Ieshúa como piedra de cimiento
 y cada uno de los judíos mesiánicos como piedra viva (Vers. 2:5)
y acostumbrarnos a adorar en él a ADONÁI por medio de tener a Ieshúa dentro nuestro.

 Sólo así podremos construir dentro de nosotros
 el Israel que Elohím espera que construyamos,

 destruyendo primero al Knaán antiguo,

a nuestro antiguo yo.

1 comentario:

  1. CADA DÍA TRATE DE BUSCAR
    ALGO QUE LO HAGA FELIZ,
    AUNQUE SEA POR UN INSTANTE.

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